Actividades inusuales, divertidas y deportivas: descubre una selección de actividades originales para disfrutar este invierno en las estaciones de montaña de los Pirineos.
Adrenalina con el parapente, la pista de trineo o el biatlón... Meditación con el yoga-raquetas o con baños calientes bajo copos de nieve... Insólito en la cima de las pistas con una apisonadora... La nieve es para divertirse. Sin duda, entre nuestras preferidas, destacan estas siete actividades que te dejarán helado.
Plantar el caballete en la nieve, en el Valle de Ossau
Las estaciones de Artouste y Gourette te llevarán esta temporada con todo su equipo de acuarelas al corazón de los más bellos paisajes del valle de Ossau. Una expedición con raquetas de nieve con pausas para tomar fotos, bocetos y tiempo de observación. Después de un picnic al sol, plantarás tu caballete en un mirador panorámico en medio de la nieve para probar con los pinceles. Todo ello en compañía de un guía artista pintor.
Ascender por las pistas con una apisonadora, en Grand Tourmalet
Al entrar en la cabina de la apisonadora, esta máquina de orugas aplasta los baches y los terrones de nieve de las pistas de esquí... Es el sueño de un niño que debes cumplir en el Grand Tourmalet: puedes acompañar al conductor de la apisonadora por la noche, con la impresión de tener toda la estación para ti. Puesta de sol en cinemascope sobre las pistas, misteriosos crepúsculos de la montaña por la noche, luminiscencia de la nieve...
Combinar deslizamiento y tiro con carabina, en Beille
La zona de esquí nórdico más impresionante de los Pirineos ahora ofrece al público en general la oportunidad de experimentar el biatlón, una disciplina militar que combina el esquí de fondo y el tiro con carabina. Primero, nos ejercitamos en un circuito. Después de una carrera sostenida llegamos al campo de tiro para tomar la posición correcta. Tumbado en la nieve, con los esquís puestos, con una carabina al hombro, apuntas a tu objetivo. Rigor, resistencia, concentración: ¡la alegría es inmensa cuando acertamos al blanco a la primera!
Vuelo en globo, en Font-Romeu
Experimenta una emocionante aventura surcando los cielos por encima de la majestuosa meseta Cerdan y en las proximidades de los imponentes macizos de los Pirineos Orientales en globo, a altitudes que oscilan entre 2.000 y 3.000 m. Disfrutarás de una vista espectacular. ¡Sensaciones garantizadas!
Meditar en la nieve, en Val d'Azun
Para los que sueñan con tomarse un tiempo para detenerse a contemplar la montaña, qué mejor que estos fines de semana de raquetas de nieve y yoga ideados por Aude y Damien (guía de montaña). A través de paisajes inmaculados, seguirás a su maestro yogui en un paseo con raquetas de nieve en el que se tomará tiempo para observar y recargar las pilas. La experiencia continúa con una clase de yoga Vinyasa y, por la mañana, una sesión de meditación y pranayama. ¡Zenitud absoluta garantizada!
Sobrevolar las montañas en Saint-Lary-Soulan
¿Te apetece volar? ¿Ver flotar tus esquís sobre las montañas? Esta temporada, la estación de Saint-Lary propone sesiones de speed-riding. Se trata de dar alas a los esquís alternando fases de vuelo y pilotaje en contacto con la nieve. Es una disciplina apasionante, pero que requiere una formación de calidad para progresar y practicarla con seguridad. El resultado es una extraordinaria sensación de libertad.
Probar todos los baños del mundo, cerca de Peyragudes
Gracias a sus fuentes termales, Pirineos ha sido destino de termalismo desde tiempos inmemoriales. Un arte de vivir compartido tanto por esquiadores como por senderistas fatigados al final de su jornada. Un ejemplo de este destino termal se encuentra en los Bains Balnéa, ubicados al pie de las estaciones de esquí de Peyragudes y Val Louron. En este maravilloso enclave, se ofrecen seis espacios tanto interiores como exteriores que rinden homenaje a los baños de diversas culturas alrededor del mundo, tales como los baños amerindios, romanos, japoneses, incas, mayas y una piscina olímpica de aguas termales. Entre las experiencias que se pueden disfrutar se incluyen baños a diferentes temperaturas (28°, 33°, 36°, 38°), jacuzzis, chorros de hidromasaje, natación contracorriente, así como un pabellón criotónico, una cabina de hielo a 8°, sauna, hammam y más. Todo esto se convierte en un ritual perfecto para prevenir dolores y permitir que la mente divague frente a un paisaje encantador.
Por Eliane Cognet
Periodista.
