La construcción del Canal du Midi surgió de una audaz idea: crear un curso de agua artificial de 240 km para conectar el río Garona con el Mediterráneo. Más allá de su propósito utilitario, este canal deleita a los amantes de la naturaleza y la cultura. Es la vía de unión entre Toulouse y el Mediterráneo, ofreciendo magníficos paisajes a lo largo de su recorrido.
A pie, en bicicleta...
Declarado Patrimonio Mundial de la UNESCO y considerado una de las principales obras del reinado de Luis XIV, el Canal du Midi se ha convertido en una visita obligada para los visitantes del sur de Francia. Sus orillas ofrecen una gran variedad de paseos bucólicos, atravesando nada menos que 3 departamentos, desde las calles de ladrillo de Toulouse hasta las coloridas callejuelas de la encantadora ciudad de Sète.
El canal, que toma impulso en Marseillan en un lugar llamado La Onglous, y desemboca en la laguna de Thau, cerca de Sète y Toulouse, es un paraíso para los amantes del senderismo. Estas son algunas ideas para pasear:
- Tomar el camino de sirga y descubrir, a tu ritmo, las numerosas obras y estructuras: puentes, acueductos, esclusas...
- Pasear por los senderos bordeados de viñedos y monte bajo para descubrir el extraordinario patrimonio natural de la región de las regiones de Languedoc-Méditerranée y Pirineos.
O sobre el agua...
La forma más fácil de explorar el Canal du Midi es deslizándose por el agua.
Si quieres disfrutar cómodamente de los encantos intemporales del Canal du Midi, nada como alojarse en una gabarra de hotel, alquilar una barcaza o alquilar un barco sin licencia. En Béziers, atravesarás el Neuf Ecluses de Fonseranes para vivir una experiencia inigualable. Verdadera proeza técnica, estas esclusas son también auténticas obras maestras artísticas.
Etapas emblemáticas del Canal du Midi
- Toulouse: Como punto de partida del canal, la ciudad rosa está repleta de puntos de interés. Así que no te vayas sin visitar algunos de los monumentos imprescindibles de la ciudad: la Place du Capitole, por supuesto, pero también la Basílica Saint-Sernin, el Pont Neuf y el Musée des Augustins.
- Castelnaudary: más allá de su famoso cassoulet, esta ciudad merece más que una simple parada en el puerto del Grand Bassin. Aquí puedes descubrir su rico patrimonio arquitectónico y admirar la habilidad de sus artesanos locales.
- Carcasona: la ciudad medieval se enorgullece de sus murallas y su castillo (declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO), pero también de sus mercados gastronómicos, de las terrazas a la sombra de la plaza Carnot y de las magníficas casas burguesas que alegran las calles de la Bastide Saint-Louis.
- La Montagne Noire y sus rutas de senderismo: situado a 1h30 de Toulouse y a 30 minutos de la famosa ciudad de Carcasona, este macizo ofrece preciosas posibilidades de senderismo en el corazón de densos bosques, regados por agradables arroyos.
- Béziers: con sus calles medievales, su anfiteatro romano, su catedral, sus casas burguesas y su nueva arena, la ciudad ofrece al visitante un magnífico recorrido por la historia y la tradición.
- Agde: una de las ciudades más antiguas de Francia, de origen griego, con la última esclusa redonda que se conserva en Francia, un casco antiguo construido con piedra volcánica negra, pintorescas callejuelas... Echa un vistazo al Museo Ephebe y a la arqueología submarina. Y si te apetece, puedes seguir hasta el castillo Laurens (obra maestra del Art Nouveau) o el puerto pesquero de Grau d'Agde, o por qué no la estación balnearia de Cap d'Agde.
- Sète: punto de llegada del canal, esta ciudad está repleta de atractivos culturales y gastronómicos. No te pierdas el puerto, el centro histórico, el Cadre Royal, el barrio de Pointe Courte, el Monte Saint-Clair... pero también sus mercados gastronómicos y sus especialidades locales (tielle, macaronade, bracusade, sin olvidar las famosas zézettes).
Consejos y Recomendaciones
El Canal du Midi es el destino perfecto para unas vacaciones ecológicas. Con sus antiguos senderos de sirga, ofrece carriles bici y caminos seguros a lo largo de todo su recorrido. Sin embargo, para disfrutar al máximo de este pequeño paraíso, lo ideal es viajar fuera de temporada, ya que el canal puede estar muy concurrido durante los días soleados. Para preservar este entorno excepcional, te sugerimos adoptar algunos gestos sencillos: practicar el principio de residuo cero durante toda tu estancia y optar por una alimentación basada en deliciosos productos locales y de temporada. ¡Te deseamos un maravilloso viaje a lo largo del agua!
Por France.fr
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