Construida en tan solo 60 años a partir de 1210, la catedral de Reims, en la región de Champagne, es reconocida mundialmente como un modelo de arte gótico. Este monumental edificio religioso es impresionante en varios aspectos: es uno de los más grandes de Francia, con 6.650 metros cuadrados; es también uno de los más luminosos y alberga la mayor cantidad de estatuas en el mundo, con 2.303 en total. Además, es famosa por ser el lugar de coronación de los reyes de Francia. Más que una simple obra arquitectónica, esta catedral es un símbolo, un lugar imprescindible que atrae la atención de turistas de todo el mundo.
Al entrar en este magnífico espacio, se puede admirar primero la luz llenando los muros, dejando al descubierto un sinnúmero de estatuas. No es extraño que este monumento fuera reconocido por la Unesco en 1991 y clasificado como Patrimonio de la Humanidad.
¿Qué es lo que da a esta estructura un carácter especial? Su papel central en la historia de Francia desde hace 800 años. La catedral de Reims es de hecho la cuna de la coronación de los reyes de Francia. ¡Ha sido testigo de la coronación de treinta y tres soberanos en poco más de 1.000 años! Entre ellos, el bautismo de Clodoveo, hacia el año 498, el cual dio origen al reino de los Francos, dando a Reims el título de ciudad de coronación.
Obra maestra de la técnica
Más recientemente también en Reims, en 1962, se hizo oficial la reconciliación franco-alemana. Una misa en la catedral en presencia del General de Gaulle y del canciller alemán Adenauer sentó las bases de la construcción de la unión europea.
Desde un punto de vista arquitectónico, la Catedral de Reims es admirable, ya que demuestra el dominio de las más innovadores técnicas del siglo XIII. Se pueden admirar sus proporciones armoniosas y la pureza de sus líneas, dándole un carácter único a esta obra maestra de la arquitectura religiosa, de 150 metros de largo y con sus torres que están a 80 metros por encima de tejado.
Grandes aberturas
Los contrafuertes son también elementos decorativos que simbolizan la elegancia de la catedral de Reims. Gracias a estos arcos que sostienen el edificio, se han podido construir aberturas más grandes, dejando pasar la luz a través de magníficas vidrieras. A lo largo de su evolución, la catedral se convirtió en el verdadero espacio de luz pensado por sus constructores de principios del siglo XIII.
El Ángel sonriente
Y la presencia de 2.300 estatuas enfatiza en la belleza del lugar: estatuas-columnas, dovelas (piedra labrada), pórticos cargados de estatuillas... y el famoso ángel sonriente. Todo esto otorga a la Catedral de Notre-Dame de Reims el título de catedral gótica más rica en esculturas.
Recomendaciones y consejos
Visitar el fabuloso monumento de los Sacres y la encantadora ciudad que lo alberga es una experiencia que vale la pena. Pero hay más razones para explorar esta región. Reconocida como una de las 49 Nuevas Maravillas del Mundo por The Sydney Morning Herald en 2023, Reims es famosa por su gastronomía, especialmente por su exquisito champán. ¿Por qué no explorar también los encantos de esta ciudad? Llegar a la capital de la región de Champagne de la manera más sostenible posible, como en tren, es una excelente opción. Una vez allí, moverse por la ciudad es fácil con opciones de transporte como autobuses, tranvías y lanzaderas eléctricas. Disfruta de una visita llena de cultura y delicias gastronómicas.
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Por France.fr
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