Escapada normanda junto a los Impresionistas

La cuna del impresionismo

NormandíaCultura & PatrimonioNaturaleza & Actividades al aire libre

Un jardín que tanto inspiró a  Monet…
© Fondation Claude Monet - Giverny - Un jardín que tanto inspiró a Monet…

Tiempo de lectura: 0 minPublicado el 25 agosto 2020, actualizado el 3 noviembre 2023

¡Descubre la magia de Normandía! Esta encantadora región no solo te ofrece hermosas playas y paisajes pintorescos, sino también una rica herencia cultural impresionista. Fue aquí donde floreció este movimiento artístico, liderado por figuras como Claude Monet, enamorado de Giverny, Eugène Boudin, nacido en Honfleur, y Paul-Émile Pissarro, residente de Lyons-la-Forêt. ¡Una escapada para llenarte de inspiración a menos de dos horas de París!

Tomar altura en La Roche-Guyon

Val d'Oise Tourisme - M Bachelery
© Val d'Oise Tourisme - M Bachelery

Entra en el castillo de La Roche-Guyon, en el Val-d’Oise, y sube a la cima del torreón. Como Claude Monet, a buen seguro te maravillará la belleza del paisaje que se extiende delante tuyo. A tu derecha, el Sena refleja los verdes y dorados de los bosques y campos vecinos y fluye hacia Normandía. A tu izquierda, el blanco acantilado calcáreo sobre el que se alza el castillo de La Roche-Guyon se curva a lo largo del apacible río. Por eso La Roche-Guyon es uno de los Pueblos más Bellos de Francia. Aquí, las paredes del castillo albergan un pedazo de la historia de Francia y el tiempo parece haberse detenido en esta época fasta. Y en la plaza del pueblo o a orillas del Sena, uno se imagina a Claude Monet, que vivía a unos kilómetros, colocando su caballete para captar el momento.

Capturar los primeros rayos de sol en Giverny

Casa de Claude Monet, Giverny
© Fondation Claude Monet - Casa de Claude Monet, Giverny

El globo se eleva suave en el cielo. Alrededor, unos campos se doran con la luz de la mañana, los bosques se agitan en contacto con la brisa. Tras una curva del Sena, tu paseo tras las huellas de los impresionistas tomará una nueva dimensión. Con salida de Giverny, instálate en la barquilla de mimbre y alza el vuelo para admirar desde las alturas la casa y los jardines de Claude Monet, los paisajes de Normandía que le inspiraron así como el castillo real de Villarceaux. Una vez de regreso a tierra fierre, paséate por la calle principal de Giverny, échale un vistazo a los escaparates de las galerías de arte… ¿Y por qué no prolongar este delicioso recorrido a la época de los impresionistas comiendo en el Jardin des Plumes? Esta encantadora mansión anglosajona combina encanto pretérito de comienzos del siglo XX y una cuidada decoración contemporánea.

Impregnarse del ambiente misterioso de Andelys

Castillo de Gaillard, en Andelys, Normandía.
© Eure Tourisme - S.Bachelot - Castillo de Gaillard, en Andelys, Normandía.

La niebla se alza sobre las ruinas del Castillo Gaillard, la plaza fuerte construida en Andelys, a unos kilómetros de Giverny, por Ricardo Corazón de León. Alzándose sobre el promontorio rocoso, el castillo tuvo un papel decisivo en la lucha entre franceses e ingleses por la conquista de Normandía. A sus pies se extienden el Sena y el encantador pueblo de Andelys. Fue este ambiente tan misterioso y cargado de historia que inspiró al pintor Paul Signac y le llevó a pintar a orillas del Sena en Andelys unos meses de 1886. Allí, realizó entre otros “La Berge”, que hoy puede verse en el Museo de Orsay. ¡Para establecer un puente entre tus visitas parisinas y tu escapada siguiendo las huellas de los impresionistas!

Hacer las compras en Lyons-la-Forêt

Pueblo de Lyons-la-Forêt
© PackShot / Adobe Stock - Pueblo de Lyons-la-Forêt

Un hayedo que se extiende a lo largo de kilómetros, el centro del pueblo organizado alrededor de un mercado medieval cubierto con sólida madera, unos escaparates de restaurantes y tiendas que salen directamente del siglo XIX. Te encuentras en Lyons-la-Forêt, tierra adentro, a 40 kilómetros de Rouen. Este es otro de los pueblos más bellos de Francia. Paul-Émile Pissarro, hijo del pintor Camille Pissarro, se instaló aquí. Fue su célebre padrino Claude Monet quien diseñó el jardín de la propiedad. Este episodio de su vida le inspiró varios lienzos, como instantáneas de su vida en la campiña normanda: aquí “La iglesia del pueblo”, allí “La charca de las ciervas”. Unos cuadros hoy a la venta en el mercado del arte. Por la noche, retoma fuerzas comiendo un plato en la plaza principal y realiza unos pasos para volver a tu habitación en el hotel La Licorne, con entramado de madera.

Admirar los veleros en los muelles de Rouen

 Vista panorámica de Rouen
© aliaumesouchier / Adobe Stock - Vista panorámica de Rouen

Las velas blancas chasquean con el viento a lo largo del muelle. Cada cinco años, el Armada es el orgullo de Rouen, ciudad portuaria ya célebre en la época de los impresionistas. Las pinturas del movimiento artístico encontraron en ella una fuente de inspiración infinita: los veleros, la llamada de la aventura, la cercanía con el mar. Un lugar prefecto para realizar un alto entre la capital París y las primeras playas normandas, más al oeste. A él se llega por carretera o por el río Sena. Cada verano, los muelles se llenan de animación. Se instalan tumbonas y las familias comen sobre el césped al borde del agua. Aprovecha también para visitar el Museo de Bellas Artes de Rouen.

Deleitarse con los platos de Honfleur

 Puerto de Honfleur
© SergiyN / Adobe Stock - Puerto de Honfleur

Su puerto ha inspirado a todos los pintores impresionistas o casi. En la parte alta del pueblo, en la posada Saint-Siméon toda cubierta con entramado de madera, es donde a Eugène Boudin le gustaba reunirlos. Desde la terraza de La Ferme Saint-Siméon, ahora un establecimiento de la cadena Relais & Châteaux, podrás admirar las vistas del Sena que fluye hacia la Mancha, asistir al baile de los pequeños barcos y disfrutar de una cocina con suaves sabores de antaño. Otra opción, la versión tasca, en La Boucane, en el mismo establecimiento. A continuación, recorre las callejuelas adoquinadas de Honfleur y visita su pequeño puerto. Sus viejas casas de colores, apretadas las unas contra las otras, inspiraron a Eugène Boudin, Claude Monet y John Jongkind en numerosas ocasiones…

Terminar el viaje en las playas de Le Havre

Playa de Le Havre
© Production Perig / Adobe Stock - Playa de Le Havre

Contemplar el humo que sale de las fábricas del puerto, el baile de los barcos que van y vienen… Finalmente, el Le Havre del s.XXI no es tan diferente del que conocieron Claude Monet, Édouard Manet, Camille Pissarro, Alfred Sisley o Eugène Boudin. Es aquí donde los representantes del impresionismo colocaron sus caballetes para inmortalizar la orilla del mar, las casas normandas frente al mar, los barcos y las fábricas en pleno desarrollo. Es, por cierto, uno de los paisajes de Le Havre quien dio nacimiento al cuadro “Impresión, sol naciente” de Claude Monet.

Por Manon Gayet

Periodista todoterreno, me encanta viajar por todo el mundo... ¡pero sobre todo por Francia! @manon_gayet

Ver más