Con 26.115 kilómetros de rutas ciclistas y vías verdes, Francia es el segundo destino mundial del cicloturismo, y campeona en crear bellas escapadas para descubrir la naturaleza, el patrimonio y los productos gastronómicos locales. Sube las montañas de los Alpes o los Pirineos siguiendo la estela del Tour de Francia, pasea por las orillas del Loira entre castillos y viñedos, recorre la costa o explora ciudades en bicicleta... Te explicamos cómo organizar tu viaje itinerante, pedalear por la ciudad y reservar alojamientos y servicios adecuados. ¡A rodar!
Cómo organizar tu ruta ciclista
A menos que quieras pedalear según te lleve el viento, lo mejor es organizar tu viaje en bicicleta con antelación para poder aprovecharlo al máximo. Ya se trate de un fin de semana, de una excursión de un día, de un recorrido en bicicleta de montaña, de una ruta especialmente adaptada a las familias o de un viaje de larga distancia, la página web France Vélo Tourisme enumera las distintas rutas ciclistas disponibles en Francia: rutas Eurovélo, rutas ciclistas nacionales, vías verdes, carriles bici, etc. Un mapa interactivo y un motor de búsqueda te permiten elegir el itinerario (un recorrido en bucle o un viaje de ida), según tu nivel técnico (principiante, familiar o ciclista experimentado), y la duración o el tema (castillos y monumentos, en el corazón de los viñedos, en la montaña o junto al mar). Las páginas web de los comités regionales y departamentales de turismo también están llenas de información para ayudarte a preparar tu viaje en bicicleta.
Viajar con tu propia bicicleta o alquilar una en el destino
Cada opción tiene sus ventajas: montar en tu propia bicicleta es tranquilizador para los ciclistas experimentados, pero tienes que transportarla. Alquilar una bicicleta es más adecuado si no quieres preocuparte por el transporte o si es tu primera experiencia de viaje en bicicleta.
Viajar con tu bicicleta
En tren El tren es el medio de transporte más cómodo para los cicloturistas. Algunas líneas de TGV (tren de alta velocidad) tienen espacios reservados para bicicletas sin desmontar, al igual que los trenes "Ouigo train classique" (suplemento de 10 euros) y los trenes Intercités (de 5 a 10 euros) o los trenes nocturnos Intercités (10 euros). La reserva es obligatoria en estos trayectos. En la mayoría de las líneas TER (transporte exprés regional), la reserva no es obligatoria (con algunas excepciones). También es posible viajar con una bicicleta plegada o desmontada en las líneas TGV Inoui e Intercités (sin suplemento) y Ouigo Grande vitesse y Ouigo train classique (previa reserva con un suplemento de 5 euros). La bicicleta debe colocarse en una bolsa de 90 x 130 cm como máximo. No se admiten bicicletas reclinadas, triciclos, tándems ni remolques. Durante el verano (de junio a septiembre o julio/agosto), los trenes disponen de servicios especiales para aumentar la capacidad de transporte de bicicletas.
En autobús Algunas compañías de autobuses aceptan bicicletas, como Flixbus, siempre que vayan embaladas o guardadas en fundas (cargo adicional de 9 euros) o BlaBlaCar Bus (en una funda, con un peso máximo de 23 kg).
En avión En general, es posible transportar bicicletas en avión, aunque cada compañía tiene sus propias normas (peso, tamaño, precios, etc.).
En barco Generalmente es posible en ferris, pero también en verano en barcos o transbordadores que unen el continente y las islas (consulta previamente a las compañías navieras). Para un agradable paseo itinerante, también puede optar por alquilar una barco fluvial, sobre todo en familia, ¡es una forma ideal de combinar viajes de movilidad suave y paseos en bicicleta!
Alquilar una bicicleta
Es posible reservar un alquiler "one way" (alquila la bicicleta en un lugar y la devuelves en otro) en muchas empresas de alquiler, sobre todo en determinadas rutas ciclistas.
Conviene saber Tanto si optas por viajar con su bicicleta como por alquilarla, puedes utilizar los servicios de transporte de equipaje (Bicybags, La Malle Postale, BagaFrance, Loire Vélo Nature, Bag Transfert, DeliverBag, etc.).
Reserva de alojamientos, restaurantes y otros servicios dedicados a los cicloturistas
Para viajar en bicicleta en condiciones óptimas, los cicloturistas pueden recurrir a proveedores de servicios con la etiqueta "Accueil Vélo", todos ellos listados en la web France Vélo Tourisme. En la lista figuran más de 7.000: alojamientos, restaurantes, servicios de alquiler o reparación de bicicletas, oficinas de turismo y lugares turísticos. Estos profesionales han asumido varios compromisos: estar situados a menos de 5 kilómetros de una ruta ciclista, disponer de instalaciones para los ciclistas (refugio seguro para bicicletas, kit de reparación, enchufe para recargar, etc.), ofrecer servicios dedicados (traslado de equipajes, lavado y secado de ropa, lavado de bicicletas, etc.) y ofrecer una acogida personalizada a los ciclistas (consejos, previsión meteorológica, rutas, etc.). La lista de alojamientos incluye campings, hostales, hoteles, alojamientos insólitos, casas rurales, etc. Una plataforma comunitaria propone (con una cuota de suscripción durante el primer año) alojamientos en familia para los viajeros en bicicleta, y la Federación Francesa de Ciclismo también enumera las mejores direcciones para beneficiarte de una acogida personalizada.
Las ciclovías de Francia
En Francia, cada región ofrece infinidad de circuitos para recorrer en bicicleta, bicicleta de montaña o bicicleta con asistencia eléctrica, así como rutas de largo recorrido que combinan ciclovías y vías verdes para descubrir las riquezas naturales y patrimoniales de la región: La Loire à Vélo, a lo largo del rey de los ríos y sus castillos; ViaRhôna, del lago Lemán al Mediterráneo; la Vélodyssée, del País Vasco a Bretaña o; la Vélomaritime, de Altos de Francia a Finistère. Según tu estado de forma y tus preferencias, podrás recorrerlas al completo o solo algún tramo, a menos que quiera imitar a los corredores del Tour de Francia y embarcarte en un largo bucle. Los gourmets también pueden aprovechar los circuitos Vélo et fromages (Bicicleta y quesos): ¡más de 8.000 kilómetros de rutas y 1.500 queserías para pedalear y disfrutar!
En bicicleta por la ciudad
En la ciudad, la bicicleta es una buena opción para desplazarse de un lugar turístico a otro y a los alrededores. En los últimos años se han realizado numerosos avances para que las ciudades francesas sean aún más accesibles a los cicloturistas y la red de carriles exclusivos no deja de ampliarse. Todas las grandes ciudades y muchas ciudades medianas disponen de bicicletas públicas de alquiler (incluido el alquiler de larga duración) en las estaciones, según el modelo "Vélib" instalado en la región parisina (1.443 estaciones en París y sus alrededores) y en 61 municipios con un parque de casi 20.000 bicicletas, el 40% de las cuales son eléctricas (1 euro los 30 primeros minutos, 2 euros cada 30 minutos suplementarios). Aplicaciones como Weelo o Lime también permiten alquilar bicicletas con asistencia eléctrica en función de la ubicación. Además de los recorridos temáticos y otras rutas en bicicleta que se ofrecen en París y en muchas otras grandes ciudades francesas, las rutas de largo recorrido, como las ciclorutas, también atraviesan las ciudades: en París, por ejemplo, ¡puedes seguir en bici la ruta Scandibérique que une Bélgica con España!
Sistemas de alquiler de bicicletas de autoservicio en las principales ciudades francesas:
Seguridad vial en bicicleta y normas de circulación
Antes de empezar a circular en bicicleta, es importante conocer las normas de circulación, sobre todo en las ciudades donde los ciclistas comparten espacio con peatones, vehículos de dos ruedas motorizados y coches. En el sitio web sobre seguridad vial, los visitantes pueden consultar algunos consejos sobre las buenas prácticas en bicicleta y descargar un completo folleto informativo.
Conviene saber: el uso del casco es obligatorio para los menores de 12 años, ya sean conductores o pasajeros, y el uso de cascos de música, auriculares, cascos con micrófono... está prohibido bajo pena de multa de 135 euros. Se recomienda llevar colores claros, un separador de peligro para evitar que los automovilistas se acerquen, espejos retrovisores y pinzas para el pantalón. Fuera de las zonas urbanizadas, los ciclistas y sus pasajeros deben llevar un chaleco retrorreflectante homologado por la noche o en caso de visibilidad insuficiente.
Para saber más:
- France Vélo Tourisme
- Bicicleta en Francia
- Federación francesa de cicloturismo
- Vélo et Territoires
- Bicicleta y territorios
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Por Pascale Filliâtre
Periodista y viajera.
A menudo, he ido hasta la otra punta del planeta para encontrar lo que Francia nos ofrece… justo al lado. filliatre.pascale@orange.fr
