Con sus pintorescos canales, Estrasburgo es una ciudad realmente encantadora y romántica de Alsacia. Además de su innegable encanto, promete un ambiente cálido, delicias culinarias y culturales, y una amable acogida por parte de sus habitantes.
Los sitios a visitar en Estrasburgo
Patrimonio histórico de Estrasburgo
Calles estrechas y sinuosas, hermosas casas renacentistas, casas urbanas de estilo parisino... la ciudad de Estrasburgo ha conservado huellas de las distintas épocas desde la Antigüedad. Esta riqueza cultural y arquitectónica le ha valido el estatus de Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1988.
La catedral y su aguja de 142 metros
Descrita por Victor Hugo como «un prodigio de lo gigantesco y lo delicado», la catedral Notre-Dame de Estrasburgo, de 142 metros de altura, se alza orgullosa sobre una amplia plaza pavimentada como en la Edad Media. Su hermoso portal romano, sus famosas estatuas y sus suntuosas vidrieras le conquistarán.
La Grande Île
Corazón histórico de Estrasburgo y centro urbano cosmopolita, la Grande Île está unida al resto de la ciudad por nada menos que 21 pasarelas. De visita obligada en la región, está repleta de edificios que bien merecen una visita. Por ejemplo, podrá visitar la Maison Kammerzell, el Palais Rohan y la Ancienne Douane. Y para completar el paseo, diríjase al barrio de la Catedral y pruebe uno de los tradicionales Winstubs, restaurantes y vinotecas que sirven especialidades alsacianas.
El barrio de la Petite France
Antiguo barrio de los curtidores y molineros, la Petite France es una zona encantadora y pintoresca del casco antiguo de Estrasburgo. A veces comparado con una pequeña Venecia por la omnipresencia del río Ill, es a la vez tranquilo y bucólico. Sus encantadoras casas con entramado de madera, sus callejuelas y sus canales le seducirán.
Neustadt
La «Ciudad Nueva» de Neustadt, construida entre 1871 y 1914 durante la anexión prusiana, triplicó el tamaño de Estrasburgo. Verdadera joya urbanística y arquitectónica, cuenta con grandiosas plazas, amplias avenidas y un agudo sentido del paisaje.
El Parlamento Europeo y sus alrededores
Designada capital de Europa desde el final de la Segunda Guerra Mundial, la ciudad de Estrasburgo ofrece la posibilidad de visitar numerosas instituciones europeas. Entre ellas se encuentra el Parlamento Europeo, terminado en 1999 y fácilmente reconocible por sus formas circulares y elípticas. Alberga a los diputados al Parlamento Europeo, elegidos por sufragio universal cada 5 años.
El reloj astronómico
Obra maestra del Renacimiento, el reloj astronómico es una de las principales atracciones de la catedral de Notre-Dame de Estrasburgo. En desuso desde la Revolución, fue devuelto a la vida por el relojero Jean-Baptiste Schwilgué en 1842. Todos los días, los espectadores disfrutan de un suntuoso despliegue de autómatas, con un desfile de apóstoles ante Cristo, puntuado por el batir de alas y el canto de un gallo. Y cada cuarto de hora, antes de la Muerte, pasan las cuatro edades de la vida, representadas por un niño, un adolescente, un adulto y un anciano.
El Museo de Arte Moderno y Contemporáneo
Los amantes del arte toman nota: Claude Monet, Pablo Picasso, Sarkis Zabunyan... y muchos otros artistas ilustres se encuentran en el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Estrasburgo, inaugurado en 1998. No se pierda la espectacular nave acristalada de 25 metros de altura y la excepcional biblioteca que contiene casi 100.000 volúmenes.
El Jardín Botánico
En pleno centro de la ciudad, 6.000 especies diferentes de plantas cubren las 3,5 hectáreas del Jardín Botánico de Estrasburgo, uno de los más grandes de Francia. Construido entre 1880 y 1884, este parque caprichoso alberga especies tropicales antiguas y raras procedentes de los cinco continentes.
Actividades ineludibles en Estrasburgo
Navega por los canales a bordo de un barco eléctrico
Explora Estrasburgo de forma divertida y original con un paseo en barco eléctrico. Gracias a los 40 kilómetros de vías navegables y a los diferentes itinerarios que ofrece la compañía Marin d'Eau Douce, podrá descubrir todos los rincones de la ciudad mientras toma el sol.
Descubre los secretos de la receta del pretzel
¡No puedes pasar por la región sin visitar la famosa Fabrique à Bretzels! En Gundershoffen, a sólo 30 minutos de Estrasburgo, visita el primer lugar enteramente dedicado a la fabricación y la historia del pretzel. En una superficie de 500 m², podrás descubrir la receta secreta de este famoso pastel alsaciano.
Descubre el mercado navideño más antiguo de Europa
El Christkindelsmärik (o Mercado del Niño Jesús) está considerado uno de los mercados navideños más bellos del mundo. Cada año, artesanos y comerciantes se reúnen en unos 300 chalets para ofrecer regalos originales y perpetuar la tradición milenaria de esta época del año. Con olor a canela y vino caliente, iluminaciones mágicas y un abeto gigante adornado con chispeantes adornos, déjate guiar por la magia encantadora de la capital de la Navidad...
Subir los 330 escalones de la catedral
Para los más valientes, intentaremos subir los 330 escalones de la catedral para llegar a la plataforma y a la casa del guarda en la cima. Una actividad intensa. Pero el esfuerzo merece la pena, ya que una vez arriba, tendrás acceso a una impresionante panorámica de Estrasburgo y sus alrededores.
Bañarse y relajarse en los Bains municipaux, joya del patrimonio de Estrasburgo declarados Monumento Histórico
Diseñados a principios del siglo XX por el arquitecto Fritz Beblo, los Bains municipaux de Estrasburgo son un edificio notable tanto desde el punto de vista conceptual como estilístico. Al llegar, se sumergirás de inmediato en otra época gracias a los diversos detalles de los periodos neobarroco y Art Nouveau. Sauna, hammam, baños calientes... reserva una tarde para relajarte y disfrutar del entorno histórico.
Admira un espectáculo envolvente en el planetario del Jardín de las Ciencias
El planetario, una sala de espectáculos enteramente dedicada a la astronomía, promete un momento de asombro y descubrimiento. Con su pantalla de 15 metros y su proyección de 360°, vive una verdadera inmersión en el espacio. Una actividad ideal para grandes y pequeños.
Pasear por el barrio de Krutenau, entre galerías y boutiques de moda
Antaño dominio de barqueros, pescadores y hortelanos, el Krutenau es hoy uno de los barrios más animados de Estrasburgo. Esta zona, que parece un pequeño pueblo medieval, alberga numerosos lugares de visita obligada, como los Bains Municipaux, la École Supérieure des Arts Décoratifs y la emblemática rue Sainte-Madeleine, con sus encantadoras tiendecitas.
Encuentra y fotografía el fresco de inspiración egipcia
En el corazón del barrio alemán de Neustadt, ve en busca de este caprichoso fresco de 1905, mezcla de Art Nouveau y orientalismo. Es una obra sorprendente que merece la pena contemplar.
Visitar la cervecería Perle y su emblemática cerveza local
La aventura de la cerveza Perle no es reciente, ya que se remonta a 1882, cuando Pierre Hoeffel creó su primera bebida. Hoy en día, bajo la dirección de su tataranieto Christian Artzner, la fábrica ofrece a los visitantes la posibilidad de descubrir los secretos de la fabricación de la cerveza que la ha convertido en un éxito, mientras disfrutan de una degustación. Es imposible no caer en la tentación (¡con moderación!).
En bicicleta por la ciudad: ¡600 km de carriles bici!
Primer destino ciclista de Francia, Estrasburgo cuenta con infinidad de rutas para visitar su rico patrimonio y sus bellos parajes naturales. Por ejemplo, la ruta Deux-Rives, de 25 kilómetros, que recorre la dimensión transfronteriza de la región a través de dos reservas naturales.
Por France.fr
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