¿Te apetece un tratamiento rejuvenecedor al comienzo de la primavera? ¡Es hora de revisar tus ideas preconcebidas sobre los balnearios y tratamientos termales! Los incomparables beneficios de las aguas termales francesas (¡sus virtudes son conocidas desde la Antigüedad!), estancias adaptadas a todo tipo de clientela y a todos los deseos, desde un fin de semana de puesta en forma a una relajación de larga duración, instalaciones de última generación, riqueza de actividades de descubrimiento de la naturaleza o culturales... son muchas buenas razones para marcar la casilla de una escapada de bienestar en uno de los 90 centros termales franceses. ¡Sigue nuestra guía!
El termalismo y la talasoterapia ¡no son lo mismo!
La talasoterapia y el termalismo son dos mundos totalmente distintos. Mientras que la talasoterapia se practica exclusivamente en la costa, con tratamientos a base de agua de mar, el termalismo se basa en el aprovechamiento de los beneficios de las aguas termales. Los balnearios termales se encuentran cerca de los manantiales, la mayoría de las veces en la montaña, pero no sólo, Marsella, en el Mediterráneo, tiene su balneario termal, al igual que Balaruc-Les-Bains, ¡a tiro de piedra de las playas de Languedoc! Cada manantial tiene su especificidad, ya que las aguas termales no tienen todas las mismas propiedades. Según su origen, ligado en gran medida a la geología, están más o menos cargadas de minerales (calcio, magnesio, sodio, potasio), halógenos (bromo, yodo, flúor), oligoelementos y elementos radiactivos. Algunas están concentradas en dióxido de carbono, como las aguas de la estación de Royat-Chamalières, que ha desarrollado tratamientos de carboterapia, utilizando a la vez las virtudes del agua y del gas. En cada manantial, hay una o incluso varias buenas razones para aprovechar sus beneficios.
El termalismo no está reservado para los mayores
Rejuvenecer en las ciudades balnearias no está ni mucho menos reservado a las personas mayores. Todas las personas, de cualquier edad, se pueden beneficiar de las bondades del bienestar termal, desde los bebés (a partir de 3 meses) hasta las mujeres embarazadas (con asesoramiento médico), pasando por los niños y adolescentes. Las estaciones termales están equipadas para un amplio abanico de personas, el 95% dispone de zonas termolúdicas donde toda la familia puede relajarse en géiseres, recorridos de hidromasaje y camas de burbujas, y en los balnearios se han desarrollado tratamientos específicos para niños. Las ciudades balnearias son también un vivero de divertidas actividades para toda la familia, que pueden disfrutar desde los abuelos hasta los recién nacidos. El relax no espera a los años... ni a la aparición de problemas de salud: ¡las estancias en los centros termales están abiertas a todas las personas que estén dispuestas a dejarse mimar!
Los centros termales son cada vez más modernos
En Francia, las estaciones termales han rejuvenecido, ¡otro motivo más para venir a hacer un tratamiento de rejuvenecimiento! En los últimos años se han realizado importantes inversiones para renovar las instalaciones y se han creado centros termales de nueva generación como Aïga Resort en Châtel-Guyon, al pie de los volcanes de Auvernia, un vasto espacio de 1.500 m² dedicado a la salud y el bienestar, o Nancy Thermal (apertura en abril de 2023) con un spa termal y un centro de deportes acuáticos de 2.500 m² equipado con una piscina olímpica. El ascenso de categoría va acompañado de la creación de Espacios Premium como en Amélie-Les-Bains, en los Pirineos, donde podrás relajarte en el corazón de las termas romanas, clasificadas monumento histórico, un marco excepcional, ¡obviamente a la altura de los tiempos!
Durante un fin de semana, también es posible
Para disfrutar de los beneficios de las aguas termales no es necesario reservar estancias largas. Es perfectamente posible llenarte de energía durante estancias que van desde un fin de semana hasta una docena de días, en función de tu disponibilidad. En un solo fin de semana, podrás sumergirte en el mundo de las termas en todas sus formas, con tratamientos de bienestar (baño de hidromasaje, aplicación de barro termal, modelado bajo el agua termal) y largas pausas de relajación en los vapores de las aguas de manantial. Los beneficios de un baño prolongado en las aguas termales se dejan sentir de inmediato, un auténtico estímulo cuyos efectos perduran en el tiempo.
¡Sin riesgo de aburrirse!
Te retamos a aburrirte durante una estancia en las ciudades balnearias. Hay tanto que hacer que te sentirás tentado a prolongar tu estancia. Para potenciar los efectos del agua termal, la mayoría de los centros termales ofrecen actividades relacionadas con el dejarse llevar y disfrutar del momento. Es un buen momento para aprender yoga, tai chi, meditación o sofrología. Y para aprovechar todas las actividades al aire libre, montaña, mar o campo, la oferta es amplia, desde esquí alpino hasta senderismo, escalada, parapente, ciclismo o cursos de aventura con tirolinas. ¿Te gusta más la cultura? Las ciudades balnearias son auténticas joyas, iconos de la Belle Époque como Vichy, en Auvernia, o Aix-Les-Bains, en los Alpes, y a menudo escaparates de estilos, desde el Art Déco a las líneas contemporáneas: ¡las Thermes de Dax fueron diseñadas por el arquitecto Jean Nouvel! Y los alrededores están llenos de tesoros por descubrir: cuevas prehistóricas, pueblos con carácter, castillos y fortalezas...
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Por Anne-Claire Delorme
Periodista y viajera.