Por las vías de la gastronomía: de Dijon a Marsella en tren

Después de un paseo por el Recorrido de la Chouette, un imprescindible de Dijon, dirígete al pueblo gastronómico para comer. ¡Una parada obligatoria antes de subir al tren hacia Beaune! Aquí podrás descubrir la fábrica de mostaza Fallot y disfrutar de una degustación picante antes de pasear por las murallas. Para la cena, prueba una crema de hongos con aceite de avellanas y una milhojas de chocolate con mousse de cacao y crema inglesa en las Caves de Madeleine. Pasa la noche en el Greet Hôtel, ubicado en medio del bosque.

• Qué hacer en Dijon

Dirección Chalon-sur-Saône para devorar la catedral Saint-Vincent con la mirada mientras disfruta de un café en Chez Louis. Para comer, prueba una pôchouse, el plato tradicional local a base de pescado de río. Y para cenar, disfruta de un buen plato de temporada en el restaurante Aromatique. También puedes optar por cenar en la brasserie del Hôtel Saint-Georges antes de retirarte a tu habitación.

Antes de continuar tu experiencia gastronómica en tren por Francia, relájate en el hammam con aromas de naranja del Hotel Saint-Georges. Luego, llega a la Ciudad de los Gones y haz una primera parada en François Pralus, un maestro pastelero y chocolatero donde te rendirás ante su brioche con pralinés rosas. A continuación, únete a un tour gastronómico de la ciudad con Lyon Food Tour, ideal para descubrir todos los productos locales sin perderte nada. Si no quieres saciarte a la hora de cenar, cruza la puerta de l’Armada para una cena refinada. Para dormir, puedes pasar la noche en el Hotel Fourvière, a dos pasos de la basílica.

• 7 selectos ultramarinos para deleitarse en Lyon

Viaja en tren a Valence y visita su centro histórico. Déjate llevar por los deliciosos pasillos del mercado central, abierto de lunes a sábado. Luego, toma un autobús hacia La Baume Saint Antoine, una truffière donde podrás conocer todos los detalles sobre la exquisita trufa negra.

Para la cena, disfruta de una experiencia gastronómica en el Bistrot André, el restaurante de Anne-Sophie Pic. Y si lo prefieres, puedes quedarte a dormir en la Maison Pic. 

En Nîmes, dirígete hacia los lugares emblemáticos: las famosas arenas, y por supuesto, Les Halles, para degustar todos los productos locales. Disfruta de una comida en Textures Comptoirs & Objets, una deliciosa cantina. Luego, participa en una clase de cocina local en el atelier bio. Si llegas a la noche con hambre, no te pierdas la oportunidad de cenar en una de las mesas de L’Imprev’, ubicada en el centro histórico. Para dormir, reserva con confianza en la Masía Le Pré Galoffre, un encantador hotel 3 estrellas que combina tradición y modernidad. Apreciarás la atención personalizada que recibirás en el corazón de la garriga de Nîmes.

• 48 horas en Nîmes tras las huellas de la Historia

¡Es la hora de explorar Aix-en-Provence! Comienza por la Brasserie Artisanale de Provence y su taller de elaboración. ¡Es ideal para disfrutarlo con amigos! Por la tarde, pasea por la ciudad y descubre los Calissons, un dulce local. Para cenar, visita el Restaurant Goadina y prueba sus platos creativos en una auténtica masía provenzal del siglo XVIII. Déjate llevar y hospédate en la Villa Saint-Ange, un hotel 5 estrellas a pocos pasos del centro, con piscina y jardín provenzal. 

• Aix-en-Provence tras los pasos de Cézanne

Esta experiencia gastronómica en tren por Francia llega a su fin en Marsella. Saborea los sablés marseillais de la biscuiterie mientras paseas por Panier. En el camino, no te pierdas la oportunidad de comprar navettes à la fleur d’oranger: ¡un dulce emblemático de Marsella! Luego, reserva una mesa en el Restaurant Gérarh, situado en el animado barrio de Cours Julien, y descubre su deliciosa cocina locavore y ecológica. Para dormir, disfruta de la Maison Juste. Te encantará su decoración minimalista y con gusto.

• Qué hacer en Marsella

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