Me llamo Bodiek Reith. Soy fotógrafo de viajes y creador de contenidos residente en Ámsterdam. A finales de agosto, tuve la oportunidad de descubrir Normandía, una región del norte de Francia, optando por una forma de turismo más ecorresponsable. En el programa: Giverny, Vernon, el Valle del Sena, Rouen y Surville, en Calvados.
Alojamiento responsable
Surville, France
Durante nuestro viaje, pasamos una noche en el Manoir de Surville. Una granja histórica del siglo XVI en el corazón de un jardín de cuatro hectáreas. Su propietario, Camille, que creció en la finca, decidió renovarla y convertirla en un hotel boutique con encanto y ecorresponsable. El hotel ha recibido varias etiquetas que certifican el turismo sostenible, y promueve el respeto por el medioambiente y la cocina local de temporada.
Lo mejor: No hay que pensar qué se quiere comer. El menú es único y se compone de productos locales frescos.
Un restaurante solidario
Rouen, France
Durante nuestra visita a Ruán, nos invitaron a comer en el restaurante Le XXI. Este establecimiento inclusivo emplea a personas con síndrome de Down, trastornos cognitivos o discapacidad intelectual. La acogida es acogedora y el servicio muy amable. La comida es excelente, con productos locales frescos. Una visita obligada en Ruán.
Una actividad ecológica
Giverny, France
Comenzamos nuestro viaje a Normandía con una visita a Giverny. Un pueblecito pintoresco a orillas del Sena, donde el pintor impresionista Claude Monet pintó su famoso jardín acuático lleno de nenúfares. Mientras paseaba por los jardines, quedé maravillado por la belleza del lugar. Las plantas, el estanque y el puente japonés están en perfecta armonía, y la diversidad de la vegetación es tal que se puede admirar durante horas. Si te apasionan el arte y la historia del arte, o incluso las flores y la jardinería, Giverny es una visita obligada.
Un agradable encuentro
Rouen, France
Durante nuestra visita guiada por Rouen, fuimos a las Halles du Vieux Marché, donde conocimos a Daniel Bourgeois, el quesero. Él y su equipo llevan casi 25 años en Rouen y ofrecen una acogida muy calurosa. Según la temporada, hay casi un centenar de quesos disponibles.
Lo mejor: Daniel te cuenta la historia de cada queso. Le apasiona su trabajo y sus productos. No dejes de visitarle.
Un destino ideal para el turismo lento
Si hay algo que he aprendido es que no tiene sentido viajar rápido y lejos. Hay que viajar con responsabilidad. Respetar el medioambiente y optar por una movilidad suave. Turismo lento significa tomarse el tiempo. Descubrir la gente, la cultura, la historia y la gastronomía de una región. En lugar de coger el avión, tomar el tren, el autobús, la bicicleta o el barco para explorar tesoros escondidos, lejos de las multitudes, y a veces incluso a pie. Es una forma menos estresante y más divertida de viajar, que además ayuda a reducir la huella de carbono durante las vacaciones.
La próxima vez que viajes, deja atrás el coche.
Por Bodiek Reith
Fotógrafo de viajes y creador de contenidos residente en Ámsterdam.